En este post comentaré varias técnicas de relajación eficaces para disminuir los efectos físicos y mentales de un proceso de estrés.

En primer lugar destacar la eficacia de la RMP (relajación muscular progresiva), diseñada y experimentada por  Edmond Jacobson en los años 20 (del siglo pasado!!). El método no requiere ni imaginación, ni fuerza de voluntad ni sugestión, lo que por sí solo supone una gran ventaja (hay personas que les es muy difícil mantenerse en una visualización). Esta técnica se basa en la premisa de que las respuestas del organismo a la ansiedad provocan pensamientos y actos que comportan tensión muscular(1). Esta tensión fisiológica a su vez aumenta la sensación subjetiva de la ansiedad. La relajación muscular profunda reduce la tensión fisiológica y es incompatible con la ansiedad (los sistemas simpático y parasimpático – del SNA- no pueden actuar a la vez). Este hecho es muy interesante porque practicando una técnica eficaz de relajación, se disminuye la activación física, con lo cual se reduce el malestar y el desgaste de los órganos implicados en el proceso. El tiempo de entrenamiento es de 15-20 minutos al día durante 15 días. Es recomendable aprender con un profesional cualificado para ello. Una de las mayores ventajas de la práctica de la RMP es que, una vez aprendida e interiorizada, la persona detecta con mayor facilidad y rapidez las tensiones corporales del día a día y aprende a reducirlas, no dejando que la tensión se mantenga en el tiempo y ocasione dolor  o contracturas.

(1)DAVIS, M., McKAY,M., R.ESHELMAN,E. Técnicas de autocontrol emocional.